Sant Anastasi

En la festividad del Patrón de la ciudad de Lleida, nos hacemos eco del artículo de nuestro amigo y compañero cofrade Jordi Curco y que ha sido publicado en los medios locales con motivo de los 50 años de la celebración de la ofrenda floral a San Anastasio.
Cada 11 de mayo, Lleida festeja a su Patrón San Anastasio que según creencia y tradición nació en Lleida, en el antiguo barrio de Magdalena, alrededor del año 263. De joven marchó a Roma, para alistarse en el ejército del emperador Diocleciano y allí, admirado de la fe y perseverancia de los cristianos, a pesar de las persecuciones, dejó las armas para hacerse cristiano. El emperador, enojado de la actitud de este joven soldado, al que había distinguido con el cargo de pretor de su guardia, dio orden de encarcelarlo, pero este escapó y emprendió el regreso a Lleida, con otros 73 compañeros de milicia ya la vez de fe, a los que él mismo había convertido con su ejemplo.
Una vez en casa, la guardia del gobernador Daciano de Tarragona detuvo Anastasi y lo trasladó a Badalona. En esta ciudad, de la que también es Patrón, fue encarcelado y martirizado, muriendo decapitado junto con los 73 compañeros de milicia el 11 de mayo del año 303.
En cuanto a su patrocinio, hay remontarnos al 9 de mayo de 1627, hace este año 391 años, cuando los concejales de la ciudad hicieron "Voto" de celebrar todos los años la fiesta de Sant Anastasi mártir, hijo de Lleida, como Patrón de la ciudad con solemne Oficio y procesión. Con el paso de los tiempos se añadieron a la fiesta religiosa diversos actos festivos populares, que han configurado la actual Fiesta Mayor.
 
Aquella antigua y solemne Procesión ha visto transformada con la actual ofrenda de flores al Patrón, que tiene lugar el mediodía de cada 11 de mayo, día de su fiesta, en la plaza de San Juan y que cumple 50 años. O dicho de otro modo, medio siglo de vida. El nacimiento de este acto que se ha convertido uno de los más populares de la Fiesta Mayor, se debe a los esfuerzos que hace cincuenta años hacía la Paeria para conseguir, en un contexto político, social y religioso muy concreto, una mayor participación ciudadana en la procesión de Sant Anastasi, que se había convertido cada vez más en un cortejo oficial, sin calor popular, a pesar del numeroso público que esperaba verla pasar.
Este hecho es una clamor en la prensa del momento. Es el caso de la revista "Ciudad" que en la crónica del día de Sant Anastasi de 1965 recoge la opinión generalizada en la ciudad con el siguiente comentario, referido a la procesión del Patrón: "... procesion, en la que los leridanos, algo inexplicable, y como todos los años no asistieron ".

Así llegaría la Fiesta Mayor de 1968, cuando la llamada Comisión de Ferias y Fiestas recibirá una propuesta del Circulo Medina vinculado a la Sección Femenina, para reconvertir la que era conocida como "Procesión Civico-religiosa de San Anastasio", en una multitudinaria Ofrenda de Flores al Patrón, protagonizada por los niños de la ciudad que irían ataviados con el traje típico catalán. La iniciativa, surgida Mª Dolores Miarnau, esposa de quien era entonces alcalde de Lleida Joan Casimiro Sangenís, tomaba como modelo la ofrenda a la Virgen del Pilar que desde 1958 se hacía en Zaragoza el 12 de octubre, en honor de su Patrona y que había arraigado con fuerza en la capital aragonesa.
 
La Comisión entorno aquella propuesta, encomendando al mismo Círculo Medina su organización. Así fue como la primera Ofrenda Floral a San Anastasio tuvo lugar la mañana del 11 de mayo de 1968, hace 50 años. El novedoso acto obligó a cambiar el concepto de la procesión, acortando el trayecto y recortando su carácter oficial a fin de darle una mayor popularidad, que con la asistencia de los chiquillos estaba asegurada. Así, la procesión con la imagen del Patrón saldría como cada año de la Catedral acompañada por la Corporación Municipal y las primeras autoridades con la "Reina y Damas de Honor de las Fiestas", el obispo de la diócesis, el capítulo catedral y el cleroEncabezaría la comparsa de gigantes, con los Heraldos y Signífers y la cerraría como era costumbre un piquete del Ejército, con bandera, banda y música. Pero en aquella ocasión ya no retornaría a la Catedral como se había hecho siempre, si no que culminaría en la Plaza de San Juan, donde el Patrón que había sido colocado en un entarimado, recibiría por primera vez la ofrenda de decenas de flores ofrendadas por una multitud de niños vestidos de catalanes.


La primera ofrenda gustó y mucho a los leridanos, habiendo sido un gran éxito de convocatoria que iría en aumento. De este acierto se hizo eco el periodista Piñeiro en su sección "Reloj de la Seo" del diario "La Mañana" del 12 de mayo de 1971: "... la ofrenda floral infantil está encarrilada definitivamente. Los niños leridanos hicieron el milagro de convertir la agonizante Procesión de San Anastasio en una fiesta alegre ... ".
La Ofrenda ha vivido durante este medio siglo de vida una continua e imparable renovación y adaptación a los nuevos tiempos, habiéndose incorporado en este homenaje a San Anastasio las entidades sociales, culturales, vecinales y las Casas Regionales. Más recientemente lo han hecho también las entidades de Cultura Popular y Tradicional, con el cortejo festivo que la encabeza. Pero eso ya es otra historia ...